Conferencia de Liderazgo Paz Global 2012
Discurso Principal
Dr. Hyun Jin Moon
Tokio, Japón

Estimados invitados provenientes de todo el mundo, nuestro ilustre conferencista de Japón e invitados de esta gran nación de Japón.

Estamos viviendo en un momento histórico, porque lo que hagamos hoy determinará el destino no solo de esta nación, sino el destino del Noreste de Asia, el continente Asiático en su totalidad y el mundo.

Quiero remontarme a algunos de los comentarios mencionados por nuestro profesor en relación a los desafíos que enfrenta esta nación, Japón. Él señaló que ha habido una rápida transición en el liderazgo político, que incluso los diplomáticos de países extranjeros se cuestionan sobre quién será el próximo líder de Japón.

Esta nación, emblemática por la calidad humana de su pueblo, quienes y a pesar de soportar una guerra devastadora, fueron capaces después de 50 años, levantar al país por sí mismos las ruinas, ubicándolo primero como el país número dos y ahora el número tres en la lista de los países con las economías más fuertes del mundo.

Esta nación siempre había sido una nación con un sentido de propósito, dirección y destino. Sin embargo, al ver esta nación actualmente, nos damos cuenta que esta nación está a la deriva en un mar sin ningún sentido de propósito, dirección o destino. Cómo hacer una marca en el destino futuro, no solo por su propia gente, sino por el Noreste de Asia y posteriormente el mundo.

La Fundación Paz Global está inspirada por una visión, y esa visión es establecer una familia bajo Dios. Esta es una visión que he llevado a cada continente del mundo, que ha inspirado a millones de personas sin importar su culto, sin importar su origen o raza étnica, sin importar su orientación política, porque es un mensaje para ciudadanos universales permitiendo a la humanidad un relacionamiento más íntimo y cercano a pesar de ser llamados Japoneses, Coreanos, Estadounidenses, Europeos, y Africanos. Estas relaciones solo pueden ser logradas y consolidadas teniendo como base las relaciones de familia.

Piensen en esto. Nosotros como seres humanos, cuando hablamos de nuestras relaciones más íntimas, nos referimos básicamente a las relaciones familiares. Porque como seres humanos, apreciamos aquellas relaciones más que cualquier otra. De esta manera, si hay un mentor, un gran profesor, ustedes dicen que esa persona es como su padre, o como su madre. Si tienen un gran amigo, su mejor amigo, ustedes dicen que esa persona es como su hermano, o su hermana. Si tienen alguna persona joven en la que ven potencial y tienen un enorme amor y afecto por esa persona, ustedes se refieren a esa persona joven como su hijo o hija, porque las relaciones más íntimas que experimentamos como seres humanos están dentro del núcleo familiar. Como una persona de fe, entiendo que todos venimos de la misma fuente. Y sin embargo, generamos prejuicios, verdad? Generamos prejuicios religiosos, políticos, raciales y étnicos. Todas las barreras y limitaciones que dividen a la humanidad deben ser dejadas de lado para reconocer lo que tenemos en común los humanos.

Y, sin embargo, como humanos permanecemos, posteriormente, a medida que vivimos la vida, y cuando yacemos en nuestro lecho de muerte para entrar a un nuevo mundo, dentro de un nuevo estado de existencia. Déjenme hacer una pregunta: Qué hicieron esos prejuicios para hacer mi vida más significativa? Para darle a mi vida un verdadero propósito? De qué manera le dieron sentido a mi vida esos prejuicios para que puedan servir como aporte a la humanidad?

La familia es la verdadera institución que forma al ser humano y a través de ella podemos percibir el tipo de persona que se edifica en nuestra sociedad. La vida, el don más preciado del ser humano, es un medio por el cual podamos realizar pequeñas o grandes contribuciones en este mundo para el progreso de la humanidad y la paz de futuras generaciones.

El concepto de alcanzar una familia bajo Dios está fundada en un principio espiritual que data de mucho tiempo y de muchos esfuerzos. Una muestra de esto es la creación de la Organización de las Naciones Unidas, que fue fundada después de la Segunda Guerra Mundial y como consecuencia del deterioro de los continentes de Asia y Europa. El objetivo de esta organización, fue erradicar las guerras y conflictos a través de un marco político, social, económico y diplomático. Sin embargo, a pesar de la creación de esta organización, los países aun entran en conflictos y guerras.

Tuve la oportunidad de ir a la ONU, y en esa ocasión hablé con muchos líderes que representan esta institución. Yo les dije, “Cuando será que vamos a cambiar nuestro paradigma de paz y reconocer lo fundamental que permite a la humanidad alcanzar ese potencial? La respuesta está basada en la espiritualidad de nuestra humanidad. Esa es la dimensión espiritual que nuestra humanidad tiene que tener para poder amar, vivir por el bien de los demás, mostrar compasión, perdonar, enaltecer nuestras pequeñas trivialidades para reunir la expresión más noble de la humanidad que permite a las personas ir más allá de las barreras, religiosas, nacionales, étnicas y/o políticas. Todo ello permitirá a la humanidad encontrar su dignidad, para ser realmente una expresión y un instrumento de paz.

La Fundación Paz Global a través de la visión de una familia bajo Dios reconoce que todos los esfuerzos por lograr la paz son importantes, pero lo que verdaderamente cuenta es la espiritualidad de la humanidad cuya base se logrará a través de esa visión que, es la visión de una familia bajo Dios.

Estoy convencido y por eso me estoy hoy aquí, que Japón puede alcanzar grandes logros así como lo ha alcanzado en el pasado, gracias a su sentido visionario. Generaciones antiguas han convertido a Japón de un estado feudal a un país moderno. Japón, en la última etapa del Siglo XX, fue la única nación asiática que pasó a ser una de las potencias mundiales en poco tiempo.

También tuvieron épocas difíciles, pero no fue debido a la personalidad del Japonés, sino a que probablemente estaban carentes de valores. Pero el espíritu visionario del pueblo japonés pudo levantar a esta nación completamente destruida y convertirla en una nación gloriosa.

Cómo una nación que ha sido tan próspera puede encontrarse hoy sin rumbos y propósitos?
Creo que el desafío fue dado por nuestro profesor Tanada. Este es el momento en el que necesitamos tener líderes que se levanten y establezcan un precedente para proponer un destino nacional.
Como ciudadano Coreano y Estadounidense, me gustaría proponer este destino.

La amenaza más grande para el Noreste de Asia es la que existe en la Península Coreana. Puedo decirles que como hijo de Coreanos, la guerra que inició hace 60 años nunca ha terminó para mi familia. Este es un conflicto civil que se comenzó hace más de 60 años y no ha culminado hasta ahora. Por razones geopolíticas y el choque de ideologías de la democracia y el comunismo, éste conflicto aún existe y afecta únicamente al pueblo Coreano.

Debido a este conflicto, muchas familias coreanas fueron separadas. La separación geográfica de Corea acarreó la separación de todo el pueblo. Esta guerra civil es conocida como la más larga de la historia.

Al ser un ciudadano de los Estados Unidos, tuve la oportunidad de estudiar en una universidad de allá una materia llamada Historia (Historia de los Estados Unidos), y respecto a la guerra civil de los Estados Unidos, la cual tan solo duró cinco años, leí respecto a un gran estadista que ayudó a liderar la nación y a manejar este conflicto, se trata de Abraham Lincoln. Él explicaba que una casa dividida, no se puede sostener.
Que eventualmente tenemos que reconocer que nuestro destino es estar juntos. Tenemos un destino común. Él decía que no se trataba de ser dos países llamados Estados Unidos, sino un sólo país llamado Estados Unidos.
De esta manera, la historia de la familia Coreana debería ser una historia no de dos casas, o una casa dividida, sino de una sola casa unida.

Cuando pensamos acerca de la amenaza más grande para la paz en el Noreste de Asia, vemos que el estado de Corea del Norte ofrece tremendos desafíos para esta región. Qué pasaría si en el futuro el pueblo Coreano logra exitosamente el proceso de la reunificación sin diferencias entre Corea del Norte y Corea del Sur, sino como un sólo país líder, defensor de la paz y unidad en esta región?

No sería Corea un ejemplo para la estabilidad y la paz de Japón? No lideraría la estabilidad y la paz del Noreste de Asia? No lideraría la paz e incluso la esperanza e inspiración para muchas naciones en desarrollo y muchas naciones que enfrentan conflictos potenciales alrededor del mundo?

Creo que el profesor mencionó algo acerca del estatus legal refiriéndose al pueblo Coreano. Yo no soy un juez, y no puedo opinar al respecto. Pero si creo que el pueblo Japonés puede ser un guía para ayudar al pueblo Coreano. El sentimiento de gratitud que caracteriza a Japón acabaría todo el resentimiento y amargura guardados como consecuencia de conflictos pasados. Y desde una perspectiva moral, se ajustará y establecerá una base fundamental para el liderazgo contribuyendo al proceso de paz del Noreste de Asia.

Si me permiten el atrevimiento, me gustaría desafiar a los académicos tales como usted, Doctor, y a los estimados líderes Japoneses que están reunidos aquí hoy, a pensar fuera de lo común y reconocer que como seres humanos tenemos cosas en común, a sostener el concepto de una familia bajo Dios, a reconocer que pertenecemos a la misma humanidad, y que tenemos el mismo destino de construir un mejor futuro. De esta manera, daremos a nuestros hijos un futuro seguro, y permitiremos a nuestros nietos ver la paz que hemos anhelado y que aún no hemos alcanzado.

Este es el desafío que les propongo, y espero que sus propuestas, sus ideales y su convicción en sobrepasar este desafío pueda traer enormes bendiciones a la humanidad en el futuro.

Muchas gracias.