Nuestro mundo está pasando por un período de transición dramática. Particularmente este año muchos gobiernos están celebrando elecciones decisivas: Kenia, Corea del Sur y Estados Unidos, sólo para nombrar unos pocos.
En tales ocasiones, es bueno recordar que el liderazgo moral y eficaz no se define por la propia religión, nacionalidad, ideología o afiliación política, incluso. Un buen liderazgo es determinado por los principios y valores por los que se vive. Mantengamos esta idea en el corazón mientras damos pasos como ciudadanos globales y desempeñamos nuestro papel en la construcción de un mundo mejor.
He estado compartiendo en muchas reuniones que el factor decisivo en esos momentos es “el liderazgo moral e innovador”. Me encontré con este video que hizo uso de un extracto de un discurso que pronuncié. Me gustaría compartirlo con ustedes aquí.
Transcripción:
“Les aseguro que el factor decisivo en esos momentos siempre es el liderazgo moral e innovador, en todos los niveles.
¿Qué quiero decir con liderazgo moral e innovador? En primer lugar, tiene que promover un “bien mayor” que pueda beneficiar no sólo al individuo, sino a la sociedad en general, a la nación y posteriormente al mundo. Esta es la orientación moral de los dirigentes que estoy describiendo. Para llegar a buen término, tiene que ser guiada por una visión y un conjunto claro de irrevocables principios y valores universales que tienen la amplitud y profundidad para abarcar la diversidad de la familia humana.
En segundo lugar, tiene que aprovechar la necesidad natural humana de crecer y así promover y desarrollar la condición humana. Este es el componente innovador del liderazgo. Como todos ustedes saben, cada cultura tiene ejemplos de hombres y mujeres extraordinarios que impulsaron a la humanidad hacia adelante en los campos de la filosofía, la ética, las ciencias, los deportes y las artes culturales, por el libre ejercicio de sus talentos dados por Dios hasta el punto de desafiar paradigmas existentes. Aunque muchos se enfrentan a dificultades debido a las restricciones religiosas, sociales y legales de su tiempo, es justo decir que el mundo moderno, con sus libertades y avances se ha beneficiado en gran medida debido a los sacrificios de estos innovadores. “