En 1950, 23 naciones bajo el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, Resolución 83 unieron sus fuerzas en la región Sureña de la Península Coreana para detener las tropas invasoras del Norte. Esto fue uno de los primeros esfuerzos internacionales combinados para el mantenimiento de paz. Aunque las Naciones Unidas han luchado algunas veces por definir el rol de sus pacificadores, ellos tienen, como en algunos casos de la guerra Coreana, ser cruciales en la protección y la reconstrucción de los países vulnerables. El 29 de mayo se conmemoran los sacrificios de los hombres, mujeres y familias de las fuerzas pacificadoras de las Naciones Unidas.
Corea tiene una deuda de gratitud por su actual independencia y prosperidad, y está esperando el día en que la península sea reunificada.
El Dr. Hyun Jin Moon hace un llamado al liderazgo sobresaliente del pueblo Coreano para labrar nuevos caminos hacia el desarrollo que asegura los valores tradicionales y el crecimiento sostenible.
El siguiente es un fragmento de un discurso realizado por el Dr. Moon en el 2010 dirigiéndose al crecimiento sobresaliente de Corea del Sur a los ranks de trabajo entre países desarrollados:
Como Coreano de nacimiento, yo probé la pobreza pos-guerra de Corea, su transformación económica ha sido realmente sorprendente. Este ejemplo moderno del crecimiento de la economía nacional no tomó siglos, sino solo unas pocas décadas y por lo tanto ofrece una alternativa de la ruta a la prosperidad.
Por eso es que FPG escogió realizar la primera Conferencia de Liderazgo Paz Global en Seúl, Corea, para el 2010. La prosperidad económica es la meta de todas las naciones, pero también es importante saber que con el desarrollo también vienen desafíos adicionales. Aunque Corea es la décimo segunda economía más grande del mundo, está actualmente enfrentando la erosión en los valores familiares tradicionales y en el patrimonio espiritual. A diferencia de la Corea de mi juventud, esta tiene las tasas más altas de divorcio y la tasa más baja de nacimientos entre los países desarrollados. Ésta se enfrentará a consecuencias políticas y socioeconómicas inimaginables. Además, el carácter orgulloso y autosuficiente de la gente Coreana está cambiando lentamente como en el caso de muchos de los países desarrollados, enfrentando fuerzas progresivas seculares que promueven las políticas de bienestar a expensa de la estabilidad política y social, como también del crecimiento económico.
Por eso es que creo que el liderazgo moral e innovador es tan importante hoy, no solo en los países en desarrollo sino en el mundo desarrollado.
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