El 23 de agosto de 2013, (17 de julio en el calendario lunar) marca el primer año de aniversario de la ceremonia de ascensión del Rev. Sun Myung Moon. Su hijo, el Dr. Hyun Jin Moon emitió la siguiente declaración honrando la vida y el trabajo de su padre, y comprometiéndose a continuar realizando el sueño que motivó a su padre.
Un año ha pasado desde que la ascensión de mi padre. Con cada día que pasa y en todo lo que hago, me esfuerzo para que mi padre sea entendido correctamente, sin parcialidades y malentendidos que han rodeado su vida increíble y trascendental.
Mi padre fue un apasionado hombre de fe de convicción que fue impulsado por un sueño arraigado en la voluntad de Dios y de la misión incumplida de la humanidad para construir un mundo de paz y coprosperidad.
Él tuvo tres grandes amores que guiaron su vida.
Primero, él amó a Dios con todo su corazón. Él tuvo una relación profundamente personal y especial con Dios que animó y motivó su vida. Él vivió su vida creyendo que el principal objetivo Dios de la creación era crear un mundo donde la humanidad pudiera vivir como una familia centrada bajo Su divino amor de “Vivir por el bien de los demás.” Esto, mi padre creía, era la base de los individuos, familias, sociedades, naciones, y mundo; saludables, armoniosos y amantes de la paz.
Mi padre reconoció la importancia de ambos, hombres y mujeres como representantes de los dos lados de la moneda, cuya naturaleza complementaria era la máxima expresión de la humanidad cuando están unidos en familia. Por eso es que el principio fundamental de sus enseñanzas involucraba el matrimonio y la creación de familias saludables y amorosas que pudieran educar hijos filiales, patriotas, santos, e hijos e hijas sagrados de Dios. Esta era la base de su Movimiento de Bendición que recibió el reconocimiento internacional de ceremonias de matrimonio masivas que fueron realizadas en cada continente del globo.
Su trabajo fue más allá de intereses religiosos, abarcando política, negocios, Organizaciones No-Gubernamentales, académicos, artes culturales, deportes y medios de comunicación. Él siempre dijo que estaba dispuesto a sacrificar la Iglesia de Unificación por el bien de la paz mundial.
Segundo, el amó la humanidad con toda su diversidad e incluso defectos. El siempre amó la gente, sin importar quienes eran, y disfrutó genuinamente estar e interactuar con personas. Como su hijo, estaba profundamente impresionado por su afecto genuino por incluso aquellos que lo perseguían y lo difamaban. Este amor por la humanidad era la fuente de su carisma magnético. Cualquier persona que estuviera a su alrededor, sentía realmente el amor que el tenía por ellos.
Tercero, él amaba la naturaleza y toda la creación. Él amó la naturaleza y toda la creación. Fue en la creación que él vió la mano invisible de Dios trabajando, diseñando todas las cosas para que vivan en armonía, siguiendo el principio de vivir por el bien de los demás. Para él, la naturaleza fue su verdadero lugar de adoración, y su verdadera escuela, donde obtuvo los principios que gobiernan la creación. Él creyó que la creación debería ser la inspiración para la coexistencia armoniosa de la humanidad y la paz mundial.
La inspiración más grande que recibí de mi padre es amar lo que el amó: Amar a Dios a través de ser un hijo humilde y agradecido cumpliendo Su voluntad, amar a la humanidad reconociendo que todos somos parte de una familia bajo Dios; y amar la creación como mi única iglesia y lugar de adoración como también mi verdadera escuela donde puedo obtener principios y valores que puedan ser la base de una estructura para construir un mundo ideal pacífico.
Desafortunadamente, él no pudo ver el sueño de la unificación Coreana y la paz mundial volverse realidad antes de fallecer.
Por lo tanto, veo esto como mi deber y honor, como su hijo mayor, establecer su legado apropiadamente y cumplir el sueño que animó e inspiró su vida. Espero que su espíritu firme viva a través de mí y mi trabajo, y profiera un entendimiento y apreciamiento más grande de su enseñanza, trabajo y vida.