El Dr. Moon ha enfatizado que la infraestructura de la paz duradera es arraigada en aspiraciones universales y principios y valores espirituales.
Sin embargo, la resolución de conflictos ha sido vista a menudo como un proceso diplomático o político. Este tipo de planteamientos están encerrando, arraigado en el auto interés, las soluciones económicas y las relaciones diplomáticas. En el siglo XX, un tiempo de inmenso conflicto, los intentos políticos y diplomáticos no han sido capaces de asegurar una paz duradera.
Global Peace Foundation está trayendo un componente espiritual dentro del proceso de paz. A menudo se olvida que la autoridad moral se necesita para iniciar el proceso de paz en cualquier nivel. La autoridad moral está bien fundada en el mérito de vivir por un propósito más alto.
Por ende, el proceso de paz comienza con el desafío más grande: Encontrar armonía dentro de uno mismo. Esto comienza con tener un propósito más grande. Para las personas más religiosas y espirituales, su sentido de propósito y el significado de la vida es un buen fundamento en su relación personal con Dios, el Creador, y sus esfuerzos para encarnar lo principios fundamentales como el vivir por el bien de los demás.
La paz hallada al tener un objetivo claro en la vida se extiende a la familia y a la tribu, y finalmente a la nación y el mundo.
En otras palabras, todos pueden participar en el proceso de paz de cualquier manera, sea grande o pequeña. La base es una buena vida, impulsada por un sueño eterno de paz duradera.
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